Shakespeare, dramaturgo y poeta

Podrían haber sido alguna de sus tragedias. Desde Romeo y Julieta a Hamlet, pasando por El rey Lear, Otelo o Macbeth. Nos podríamos haber quedado con cualquiera de sus comedias. Con El sueño de una noche de verano, El mercader de Venecia o La fierecilla domada. Incluso podríamos haber elegido alguna de esas obras históricas que escribió sobre los reyes ingleses. Tal vez podría haber llegado su Cuento de invierno o La tempestad, pero para este día en el que se cumplen los 400 años de su fallecimiento nos hemos quedado con su poesía.

Y es que, además de ser uno de los dramaturgos más destacados que ha dado la historia de la literatura, William Shakespeare también cosechó versos poéticos como los que recoge La violación de Lucrecia, una obra que traemos a nuestro rincón de reseñas en la edición realizada por Vaso Roto dentro de la colección Esenciales. Y, en este sentido, esencial resulta este poema narrativo que resalta un episodio trágico como es la violación de Lucrecia por parte de Tarquino, apodado El Soberbio y último rey de Roma.

Esta edición especial incluye tanto el texto original en inglés como la traducción realizada por José Luis Rivas. Tras ser violada, Lucrecia envía una carta a su marido Colatino para que regrese cuanto antes. Y justo al llegar y tras contarle lo sucedido, ella se mata con un puñal. El pueblo se conmovió tanto que acabó expulsando al Rey, a los Tarquinos de Roma. Una obra para no olvidar, para disfrutar del Shakespeare poético en un día tan especial como el de hoy.
Por: María Vila
Fecha: 23-04-2016