Juicio a los grandes de la historia

El juez Vázquez Taín vuelve a sentar en el banquillo a Jesús de Nazaret, Galileo, Sócrates o Los Templarios

El juicio a Jesús de Nazaret siempre se ha considerado como el más injusto de la historia, pero ¿y si hubiera sido condenado de manera justa teniendo en cuenta las leyes de la época? También la historia ha vendido que Galileo Galilei fue condenado en su día por herejía por el popular Eppur si muove. ¿Pero de verdad fue juzgado por esa cuestión? ¿Y si todo estaba pactado de antemano? 

Con tantas sentencias y resoluciones judiciales que están levantando ampollas actualmente, viajar en el tiempo para analizar los Grandes juicios de la historia (Espasa) pueda parecer algo innecesario, pero conocer las leyes y el sentido de la justicia en diferentes épocas también puede ayudar mucho a conocer  la evolución del derecho. 

Como indica José Antonio Vázquez Taín, autor de la obra, en el prólogo, "analizar un juicio exige trasladarse mentalmente a la época en la que se produjo y tratar de comprender cómo pensaban quienes vivían en ella, pues aun cuando solo hayan pasado unos años, muchos aspectos de entonces pueden resultarnos ajenos ahora. Podemos compartir o no algunas formas de pensar, pero debemos entenderlas. Luego tendremos que conocer las leyes que regían y su forma de interpretarlas, que puede alejarse mucho de nuestros usos. Y solo así podemos acercarnos un poco a la perspectiva adecuada para valorar el acierto o el error de sus fallos". 

Y eso es lo que hace el juez Vázquez Taín, se traslada -con una gran documentación- en el tiempo para interpretar como magistrado algunos de los juicios más mediáticos de la historia. Así, el libro aborda los juicios a Jesús de Nazaret, Sócrates, Hitler, Galileo, O.J. Simpson, Los Templarios o Núremberg. 

Jesús

"No tiene mucho sentido la traición de Judas por dos motivos: Judas administraba el peculio del grupo, por lo que disponía de mucho más dinero que ese, y, además, su supuesta traición consistía en identificar a Cristo, lo que a todas luces parece innecesario, pues el Nazareno predicaba todos los días en el Templo y a la vista de quienes lo iban a detener". 

Sócrates

"Sócrates no cía eren la democracia y era partidario de que el gobierno estuviese en manos de 'los que saben'. Lamentablemente, como su argumentando solía centrarse más en refutar que en afirmar, no aclaró quiénes eran esos escasos privilegiados, aunque es probable que no se estuviese refiriendo a los tecnócratas, sino a los filósofos". 

Galileo

"El juicio a Galileo -si es que llegó a existir, pues todo parece pactado- en modo alguno fue una lucha entre ciencia y fe, pues afirmar esto implica ignorar intencionadamente un dato crucial: Galileo era profundamente religioso. Tampoco podemos olvidar que ningún científico llegó a afirmar con rotundidad la rotación de la Tierra hasta el péndulo de Foucault". 

Tras situarnos en el contexto histórico y jurídico, Vázquez Taín analiza los hechos para ofrecer, posteriormente, su veredicto final. "Nadie identifica a la Atenas de Pericles como ejecutora de Sócrates, ni al filósofo de la Academia como crítico de la polis del Ática, y, sobre todo, de su forma de gobierno, simplemente porque aquellos que no eran filósofos podían ejercer el poder". 

El adulterio, el incesto, el concubinato y las relaciones homosexuales eran considerados actos penales tanto para la Iglesia como para el derecho laico, y por ello podían ser perseguidos por ambos'

'Grandes juicios de la historia'

Aunque se juzgue lo que en muchos casos la historia no se atrevió a juzgar, no nos vamos a encontrar con un libro basado únicamente en leyes e interpretaciones jurídicas. No nos vamos a aburrir y nos van a sorprender bastante las valoraciones que realiza el autor de Grandes juicios de la historia

Por: Luis Galindo
Fecha: 25-06-2018